En la era digital, las colaboraciones entre marcas e influencers se han convertido en una herramienta de marketing indispensable. Sin embargo, para que estas alianzas sean exitosas y sostenibles, la transparencia no es solo una buena práctica, sino una obligación legal y ética. En España, Autocontrol, la Asociación para la Autorregulación de la Comunicación Comercial, juega un papel fundamental en la promoción de una publicidad responsable. Su Código de Conducta garantiza que los consumidores puedan diferenciar claramente el contenido publicitario del contenido editorial.

¿Cómo puedes asegurar que tus colaboraciones cumplen con estas directrices? Te presentamos el ABC de la transparencia:

A: Autenticidad y Visibilidad Clara de la Publicidad

El pilar fundamental del Código de Conducta de Autocontrol es el principio de autenticidad o identificación de la publicidad. Esto significa que cualquier contenido que tenga una naturaleza publicitaria debe ser claramente identificable como tal para el consumidor. Ya sea un post en Instagram, un vídeo de YouTube o un TikTok, si existe una contraprestación (ya sea económica, cesión de productos, invitaciones a eventos o cualquier tipo de control editorial por parte de la marca), se considera publicidad y debe ser revelado.

¿Cómo hacerlo? Autocontrol y la AEA establecen que, si la naturaleza publicitaria no es obvia, debes incluir una indicación explícita, inmediata y adecuada al medio. Las etiquetas recomendadas y válidas son “#Publicidad” o “#Publi”. Asegúrate de que esta revelación sea visible desde el primer momento, sin necesidad de hacer clic para ver más o desplazar la pantalla.

B: Bases Contractuales Claras y Responsabilidad Compartida

La transparencia no solo se aplica al consumidor, sino también a la relación entre la marca y el influencer. Es crucial formalizar las colaboraciones con contratos o acuerdos claros que especifiquen las obligaciones de ambas partes. En este proceso, debes incluir una cláusula que indique que la actividad está regulada por el Código de Conducta de Autocontrol.

Es importante recordar que la responsabilidad de cumplir con las normas de transparencia recae tanto en el anunciante como en el influencer. El nuevo Código de Conducta, que entró en vigor el 1 de octubre de 2025, incluso establece una responsabilidad solidaria, lo que significa que tanto la marca como el creador de contenido pueden ser conjunta y solidariamente responsables en caso de incumplimiento. Esto subraya la importancia de una comunicación fluida y un entendimiento mutuo sobre las directrices.

C: Compromiso Continuo y Cumplimiento Proactivo

Cumplir con el Código de Conducta de Autocontrol es un viaje, no un destino. Implica un compromiso continuo con las buenas prácticas y una actitud proactiva. Si eres una empresa adherida a Autocontrol o la AEA (o ahora IAB Spain), te beneficias de un marco de autorregulación que busca fomentar una publicidad responsable, veraz, legal, honesta y leal.

Además de incorporar estas prácticas en tus operaciones diarias, puedes utilizar los recursos que Autocontrol ofrece. Su servicio de Copy Advice® permite a marcas y agencias revisar la corrección legal y deontológica de un briefing antes de entregárselo al influencer, minimizando riesgos. El Jurado de la Publicidad de Autocontrol también se encarga de resolver las reclamaciones por incumplimiento, y puede realizar monitorizaciones proactivas para asegurar el cumplimiento del Código.

En resumen: la transparencia en las colaboraciones con influencers no solo construye confianza con tu audiencia, sino que te protege de posibles sanciones y fortalece la credibilidad de tu marca en un ecosistema digital cada vez más regulado. Al seguir este ABC –asegurando la Autenticidad, estableciendo Bases claras y manteniendo un Compromiso constante–, estarás en el camino correcto para colaboraciones éticas y exitosas.